El bizcocho que os traigo hoy es de origen francés. Igual os resulta curioso su nombre, pero tiene un motivo matemático: se elabora principalmente con cuatro ingredientes que se mezclan a partes iguales. También es conocido como bizcocho Bretón (gracias Chelo por el aporte.
Esos cuatro ingredientes son huevos, harina, mantequilla y azúcar por lo que es un bizcocho muy sencillo. Pero podemos ir más allá, yo le he echado una cucharada de esencia de vainilla pero podemos ponerle frutos secos o algún licor para darle un toque original y único.
El molde original de la receta es rectangular, de unos 8cm de ancho, 23cm de longitud y 7 de altura. Yo no tenía ninguno disponible en esos momentos por lo que opté por un circular. El resultado es igualmente bueno. Podemos cambiar las cantidades de masa según el molde. Si es más pequeño, menos cantidad. Lo importante es los mismos gramos de cada uno.
Ingredientes:
- 195g de mantequilla
- 195g de harina
- 195g de azúcar
- 195g de huevos: los gramos son aproximados, si
queremos hacer el bizcocho de 3 huevos o de 4
pesamos los huevos cascados y ponemos la misma
cantidad del resto de ingredientes ajustando la
levadura para esa cantidad de harina
- 6g de levadura de repostería
- un chorrito de esencia de vainilla
Elaboración:
1. Dejamos la mantequilla a temperatura ambiente
para que se ablande.
2. Precalentamos el horno a 170ºC. En un bol
tamizamos la harina y la levadura.
3. Removemos la mantequilla con el batidor manual
o con la amasadora que tengamos. Echamos el
azúcar hasta obtener una masa blanquecina.
Incorporamos los huevos previamente batidos y
mezclamos bien. Aromatizamos con la esencia de
vainilla.
4. Incorporamos la harina y la levadura removiendo
con una espátula de goma con cuidado para que no
quede pegajosa. Si batiésemos con la batidora
incorporaríamos demasiado aire y no quedaría la
masa perfecta.
5. Cubrimos el molde con papel de horno o lo
engrasamos. Vertemos la masa y la extendemos
uniformemente. Agitamos con cuidado para que no
queden bolsas de aire.
6. Dejamos en el horno unos 40 minutos. Dejamos
reposar sobre una rejilla a los 5 minutos de
sacarlo.
7. Cuando esté frío, ¡ya podemos comerlo! Yo le he
puesto dulce de leche (me encanta) por encima
para acabar de endulzar esto va a gustos.