Cuando vi el reto de “fruta light” de Cocinar con recetas, me vino a la cabeza hacer un soufflé de manzana. Nunca había preparado un soufflé ni tenía ningún molde indicado para hacerlos. Sí, un desastre si quieres que suban bien.
Pero, como lo que importa son las ganas y me apetecía experimentar me puse a prepararlos. Es verdad que el aspecto no es que fuera una maravilla, pero la textura era superligera y el resultado riquísimo (en casa voló). ¿Lo mejor? a parte de ser sano y light, se hace en un momento.
Ingredientes
♡ Dos manzanas dulces
♡ Dos claras
♡ Una canela en rama
♡ Peladura de un limón
♡ Una cucharadita de miel de limón
Elaboración
- Por un lado, pelamos las dos manzanas y las
cortamos a cachitos pequeños. Las ponemos a
hervir para hacer una compota con un poco de agua.
Para aromatizar, ponemos la canela y la peladura
de limón. De manera opcional, podemos poner una
cucharadita de miel, no tanto para endulzar, sino
para darle más aroma. Cuando la manzana esté
blanda, retiramos la rama de canela y el limón y
lo trituramos formando una especie de puré de
manzana. Antes de triturar, la manzana ha de
quedar sin caldo. Si le echamos demasiada agua,
podemos quitarla antes de triturar porque sino el
soufflé tendrá demasiado líquido.
- Por otro, montamos las claras. Cuando esté a
punto de nieve, incorporamos la manzana triturada
y removemos lentamente con movimientos
envolventes. Cuando esté integrado, pasamos la
mezcla a los moldes y lo metemos en el horno
previamente precalentado a 180º durante
aproximadamente 17-20 minutos dependiendo del
molde. Cuando esté hecho, apagar el horno y no
abrirlo hasta pasados 3 minutos.