Este año me he visto con muchísimos nísperos a los que les he tenido que dar salida. Me encantan y me da pena que sea una fruta tan fugaz. Pero bueno, mientras hay las disfruto.
Buscando por la blogosfera qué hacer con ellos, topé con este blog, el rincón de la Mariposa y seguí su bizcocho de nísperos con alguna modificación.
El resultado es un bizcocho tierno, esponjoso. El sabor de los nísperos resulta sutil y muy agradable. Si tenéis nísperos no dudéis en hacerla o sino guardar la receta para el año que viene.
Ingredientes
- 250g de nísperos pelados y deshuesados
- 200g de harina
- 175g de azúcar
- 4 huevos
- 80ml de aceite de oliva virgen extra suave
- 1 sobre de levadura
- zumo de medio limón
- una pizca de sal
Relleno: mermelada de nísperos y dulce de leche
Azúcar glas
Elaboración
1. Una vez pelados y deshuesados los nísperos, los
triuramos bien con el zumo de limón. Reservamos.
2. Precalentamos el horno a 180ºC. En un bol
cascamos los huevos y ponemos el azúcar. Batimos
bien bien hasta montar los huevos. Pueden llegar
a triplicar su tamaño. Añadimos el aceite y el
triturado con una cuchara intentando que no bajen
mucho los huevos. Incorporamos con movimientos
envolventes la levadura y la harina tamizadas
junto con la sal.
3. Ahora toca momento horno. Yo he usado un molde
metálico normal (sin agujero central ni nada de
eso). Más o menos estará en media hora. El truco
es usar un palito de madera y pinchar el bizcocho
Si sale limpio es que está hecho. Dejamos reposar
5 minutos y pasamos a una rejilla hasta que esté
fría.
4. Por último, abrimos el bizcocho y ponemos en
una de las dos mitades mermelada de nísperos y en
la otra dulce de leche. Cerramos y decoramos con
azúcar glas por encima.
Consejo: es un bizcocho que se puede dejar de un día para otro para que el bizcocho absorba bien el almíbar de la mermelada. Es extremadamente jugoso y toda una delicia.